Tierna la mirada sumisa se embelesa ante su alteza,
se siente mujer y hembra, dulce de pan y caricias,
se siente madre divina y procreadora de esencias;
seno de amor y flor de Riviera. Y le da besos a la vida,
porque un buen hijo le ha entregado a manos llenas.
Piedra preciosa de delta, pequeñez de tu estatura,
mansas cigüeñas viajeras te trajeron en su cesta. Y
te dejaron allá arriba colgado de la chimenea; y a
ríos que lagrimas llenan, lloraste para que te vieran
dentro de ella. Lloraste como en cuentos y novelas.
¡Yo soy tu madre! ¿Recuerdas? La que te trajo al
planeta, la que te portó en entrañas que luz legan.
Yo soy tu madre, belleza; y tú fuiste mi placenta en
otra época. Tú eres mi sangre y la razón de mi
existencia, tú eres el ente que no espera para alocar
la cabeza a quien te pierda. Tú eres mi presente
de quimeras; y la pupila que mis labios adormentan.
Y tú, mi bebé de mil delicias, tus eres la hiedra
florecida que se erguirá por senderos hasta que el
sol ponga el día. Tú eres mi deidad devota por la que
viviré mis penas y sonrisas, por la que dejaré a las
olas imaginar que al horizonte el puerto ahonda.
¡Porque por ti yo remuevo el cielo y trueno!
Ven a mis brazos tez linda; y siente que mis manos
te pintan en un oleo al mediodía. Sé que te pienso
de prisa; y que te beso con tinta envuelta en rimas
que inspiran tus caricias. Sé que tú eres mi herencia
y la excepción de mi reglas; mi confitura Delicia…
Yo soy tu madre mi esencia; yo soy tu madre…
Yo soy tus pies y cabeza, yo soy la historia que
piensas y que en memorias te lleva saliéndome de
entre las piernas. Yo soy tu cuna, tu estrella y las
venturas de tus aires. Yo soy tu madre y ya lo sabes,
nunca te olvides de amarme aunque a otros mates.
Nunca deje de respetarme, aunque yo te ponga en
jaque. Nunca olvides al tocarte que yo te besé tinto
en sangre, que grité como lo saben y que volé por
los mares al pujarte. Y ahora miro que te tengo: Y te
aprieto entre mis dedos; y te apreso con mis besos.
Y canto oronda un bolero; y repito un yo te quiero
mi hijo bello. Y te dedico estos versos y consejos…
Yo soy tu madre sincera, la que te habla sin pena
aunque la ataques con genios. Yo soy tu espada y tu
estandarte, la que todo te perdonará, la que te curará
las heridas y los males. Yo soy tu madre, recuerda,
quien te desea que en la vida seas grande.
Pero nunca me defraudes, nunca seas un cobarde,
nunca mientas al contarme; y dime siempre que
haces. Porque los hijos sin madres son como flores
que no llegan a secar sobre los arboles, pues
brotan sombrías; y se caen sin podarles…
¡Yo soy tu madre mi esencia; yo soy tu madre…!
Picture by Mary Paquet.
Traveling Fashion Designers 🌼
vibraciones
Bitácora para gente que va leyendo a trabajar #NoSinMascarilla
Disfrutá de leer las nuevas novelas, cuentos, poemas y artículos del escritor y director de cine Adrián Gastón Fares.
CON LOS HILOS INVISIBLES DEL ALMA
Últimas noticias en español de Latinoamérica, Estados Unidos y el mundo
Vintage apparel for men and women including dresses, shoes, handbags, outerwear, intimates and accessories from the 1950s through 1980s.
sanación en Cristo
Cultura, Reciclaje e Intercambio de Velocidades
Poesía, relatos, novela romántica y otras hierbas. Graciela Giráldez